Una vez que tengo la retroiluminación funcionando, hay que montar los interruptores y conectar sus cables. La mayoría de los interruptores funcionan en INPUT_PULLUP. Esto quiere decir que se conectan directamente a la patilla de tierra y a una entrada de Arduino. No hay que poner resistencias ni nada, porque van con una resistencia interna de Arduino. Por eso, todos estos botones e interruptores solo llevan dos cables.
El interruptor del paracaídas, lleva un led que se ilumina al conectarlo. Este interruptor va de otra manera. Una patilla al positivo; la de salida, a una resistencia y a tierra. Y la tercera patilla, que es del led, a tierra también. Además, en la patilla de salida, hay que conectar otro cable que irá a una entrada de Arduino, que detectará si hay corriente o no en dicha patilla y, por lo tanto, si el interruptor está abierto o cerrado. Conectado de esta forma, el interruptor se ilumina cuando está en ON y se apaga cuando está en OFF.
Los botones van igual que los interruptores normales, es decir, una patilla a tierra y la otra a una entrada de Arduino en INPUT_PULLUP.
Y los leds de la pantalla van de dos den dos, en serie con una resistencia, y van a un pin de salida del Arduino. Luego, por software,haremos que se enciendan o se apaguen cuando queramos, dando corriente a este pin. Los leds del tren de aterrizaje, que son tres, no pueden ir en serie todos juntos, porque no hay voltaje suficiente para hacerlo así. En vez de eso, están montados en paralelo, 2 por un lado y 1 por el otro.
Una vez hecho esto, se conectan todos los cables al arduino, se le pone un cable usb largo, y ya está listo para programarlo y luego para funcionar.
En todo este montaje, lo que más me ha costado ha sido conseguir que todo quede más o menos colocado en su sitio. Hay poco espacio detrás del panel para todo lo que tiene que ir; interruptores y botones, leds de retroiluminación, leds de la pantalla, todo el cableado… Y todo tiene que ir aislado, para no tocar las conexiones de los leds y de los interruptores, que van al aire, claro.
Para que todo quede más o menos chulo, le he hecho una caja. Está hecha de metacrilato blanco semitransparente (el que he utilizado en el frontal). La he pegado con superglue, y le he puesto una trasera con un agujerito en uno de los lados, para sacar el cable. Luego la he pintado de negro con un spray al agua. Ha quedado bien, pero he tenido algún problema de que se me ha levantado la pintura porque no le he dado imprimación. Así que he tenido que volver a pintar, y apuntar para la próxima vez, que hay que utilizar imprimación y lijar un poco el metacrilato para que agarre bien.
Una vez hecho todo esto, ya solo queda la parte de programación del Arduino.